domingo, 23 de septiembre de 2007

Balaguer

Era a mediados de los sesenta, yo tenia alrededor de cinco o seis años, me desperté un dia y de súbito frente a mi casa note el edificio mas grande que mis ojos jamas hayan visto, o talvez había ído creciendo poco a poco frente a mis ojos pero yo no lo había notado porque en aquel entonces solo tenía tiempo para jugar pelota, marotear guayavas y limoncillos, pensar y descubrir el universo; Yo crecí en un barrio muy unido, teníamos alrededor de cinco patios de vecinos que se comunicaban unos con otros divididos por alambres de púa facil de cruzar porque los palos se torcían con el tiempo, de cansancio, de aburrimiento o de no ver la vida pasar; Unos cuantos días despues que apareció el edificio se " empezó a regar la voz en el pueblo de que venía El Presidente de la Republica, el Doctor Joaquin Balaguer a inaugurarlo, empezaron a llegar guardias rana" de la Capital, la gente se aglomeraba en la esquina del Centro Medico no solamente a comentar del famoso edificio que era inmenso, sino también a hacer planes de que le pedirían al Doctor si se toparan con la dicha de ser elegidos para llegar cerca de el a expresar sus necesidades, hubo gente que hasta su lista de pedidos tenia escrita por que nunca se puede estar mal preparado para ver al doctor "Va uno y se tranca y no le sale la voz delante' e' sihombre" decian algunos "eso e' jimposible vei je sihombre, yo no mi arriego a que un guaidia me rompa la madre no" decían otros un poquito mas negativos.
De vez en cuando mi Papá recibía visitantes pidiendole permiso para venir a visitar la casa el día de la inauguracion porque como mi casa quedaba frente al Centro Medico; era el mejor sitio para pendenciar y talvéz lograr ver al Doctor Balaguer sin que el tulmuto de gente te arrollára o un policia te rompiera la madre como decian algunos.
Llegó el dia tan esperado, un Domingo, me levanté bien temprano con el tumulto y la bulla, ya a esa hora la casa estaba llena de gente, mi Papá tuvo que darle permiso a la policia para que llenaran el patio de militares Por que se decidió que el Doctor iba a llegar al patio de al lado que era mas directo a la tarima de donde iba a hablar Balaguer pero por seguridad había que tener guardias por todo el barrio; Un señor de sombrero se asomo a la puerta del frente pidiendo usar el baño por favor, algo que me encontré muy raro que un extraño quisiera usar el baño de mi casa sin conocernos; Al ser tan pequeño yo solo veia pantalones y faldas caminando por toda la casa; para mi no significaba gran cosa a esa edad, este señor que todo el mundo daba la vida por ver.
Dentro del tumulto de pantalones y faldas salió una mano de repente, era mi Mamá, "Muchacho ven que hay que bañarte, para que te' limpiecito por si acaso".
Mi Mamá me pasó a mano de la trabajadora de la casa que me desvistió rapidamente y me metió al baño, a esa edad ya yo me bañaba solo pero ese dia había que darme un baño especial para que no me quedara cota en el cuello por si acaso, la trabajadora se afanaba en bañarme rapido pero bien bañado como si fuera yo el que iba a recibir a Balaguer.
Me cambió de mala gana por que yo le estaba robando el tiempo de estar afuera pendenciando, "poi lo meno pa oi cuando llegue, poi que a jese hombre no se le va a podei aceicai nadie" decia la trabajadora.
De repente se armó un corredero y la gente empezo a gritar y a correr, llegó el doctoi!!, llegó el doctoi !! gritaba la gente, una vecina llegó corriendo a la casa, "lo metieron en el patio de ai lao, yo lo ví".
Tanta algarabía me dio curiosidad y aprovechando la confusión y la emoción de los viejos me salí de la casa y camine entre pantalones y faldas hacia la casa del vecino, cuando me asomé al callejón se me atravesó un uniforme de policia con una ametralladora en las manos y me pregunta a la vez que me pone la mano en el hombro, Que tu hace aqui tiguerito? tu quiere ver el Doctor? yo mire hacia arriba para ver quien me hablaba pero el sol no me dejaba decifrar su cara, me puse la mano sobre la frente tratando de tapar el sol pero nada, el policia al ver que no va a sacar palabra de mi, me dice dale, dale pa'que vaya y vea el doctor tiguerito, sigo caminando, mas pantalones, la mayoria grises, mas faldas, siento una que otra mano que me tocan la cabeza como si yo fuera una mascota; De repente ahi estaba el Doctor Balaguer sentado en una silla en el medio del patio secandose el sudor de la cara con un pañuelo, sentí una mano fuerte que me agarro por el hombro, " que tu hace' aquí muchacho?" me pregunto el policia, en eso yo lo mire sin contestar y al mismo tiempo Balaguer dirigió su mirada hacia mi, "Déjenlo!" díjo, "traíganmelo" alguien me agarró de la mano y me llevó hasta el, se quedó mirandome y me levantó por los sobacos, me cargó y me sentó en sus piernas, "Como tu te llamas amiguito?' me pregunta yo lo miro con ojos de asombro le veo las canas en las patillas, la piel colorada como nunca la había visto y no paraba de sudar, en eso un militar grita Ya vamo' a tarima Doctor" a la vez que me quitaba de las piernas del doctor y me ponía en el piso, balaguer se levantó lentamente y se perdio en un tumulto de militares.
Yo regresé a mi casa, mi Mamá me dice; " donde tu' taba muchacho" y cuando abrí la boca para contestarle, alguien dijo "ei diablo vale, mire como andan lo guaidia ahi!", "a je sihombre no se le va pode' aceicai nadie".

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